En la actualidad existen diferentes tipos de planes de pensiones, según la clasificación que se haga. Ahora bien, atendiendo a la política de inversión de cada uno de ellos, ¿qué ofrecen?…
Los planes de pensiones constituyen uno de los productos de ahorro más conocidos que existen. Los poderes públicos han fomentado su contratación, con vistas a que los futuros pensionistas no pierdan poder adquisitivo y todo el peso no recaiga en el dinero público. No obstante, podemos encontrar en el mercado otro tipo de productos, más enfocados a la inversión, que han demostrado ser más efectivos y versátiles.
La diferencia fundamental, más allá de las cuestiones fiscales, es el hecho de que los planes de pensiones son productos diseñados para el ahorro a largo plazo. Su carácter es denominado como “finalista”. Es decir, tienen una finalidad concreta.
Más que una finalidad, se trata de un elenco de contingencias de tipo social: jubilación (como principal contingencia), viudedad, enfermedad grave, dependencia, orfandad, incapacidad permanente, desempleo, etc.
Esto repercute a que son productos totalmente ilíquidos. Eso sí, con la particularidad de que es posible realizar traspasos entre planes de pensiones. Los traspasos entre planes de pensiones no tributan por sí mismos. Sin embargo, los incentivos y los regalos que nos puedan hacer las diferentes entidades sí que están sujetos a impuestos (para Hacienda son rendimientos de capital mobiliario, según el artículo 21 y 25 de la Ley de IRPF). Además, puede existir permanencia y es posible que debas hacer frente a una penalización por el traspaso.
Por este motivo es necesario conocer bien qué te ofrece cada uno de los tipos de planes de pensiones, porque no son productos financieros tan flexibles como las inversiones directas o los fondos de inversión.
Toda la información:
¿Qué tipos de planes de pensiones existen?
Pueden hacerse varias clasificaciones para establecer los tipos de planes de pensiones:
- Según quién sea el promotor: según quién promueva la creación del plan de pensiones, podemos hablar de planes de pensiones individuales, de empleo o asociados.
- Según el régimen de aportaciones y prestaciones: en este caso, podemos distinguir entre planes de pensiones con aportaciones definidas, con prestaciones definidas y mixtos (en las que se combina ambos tipos de planes de pensiones).
Pero lo verdaderamente relevante para el inversor medio, el cual seguramente valorará la posibilidad de realizar aportaciones a un plan de pensiones individual (el que contratan las personas físicas para ahorrar de cara a su jubilación), es la distinción que se hace de los planes de pensiones según la política de inversión que se lleve a cabo.
Esta distinción define los tipos de planes de pensiones más conservadores o más rentables (también más arriesgados). Es lo que, a fin de cuentas, determina lo que pueden ofrecernos los planes de pensiones.
Tipos de planes de pensiones según su política de inversión
La clasificación de los planes de pensiones en función de cuál es su vocación inversora no es un asunto que deba tomarse a la ligera, puesto que de ello depende el riesgo que vaya a asumir el ahorrador. De esta manera, es preciso conocer primero cuál es tu perfil como inversor antes de decantarte por una categoría en concreto.
A continuación, te mostramos los tipos de planes de pensiones en función de su política inversora cartera y la rentabilidad que puedes esperar de cada uno de ellos.
Planes de pensiones de renta fija corto plazo
Los planes de pensiones de renta fija invierten en activos financieros de esta naturaleza, tanto los emitidos por entidades públicas como privadas.
La renta fija constituye una política de inversión más conservadora, este tipo de activos (y, por consiguiente, esta categoría de planes de pensiones) se caracterizan por ser más estables en los mercados financieros, pero también ofrecen una rentabilidad más reducida.
Son los productos adecuados para aquellos ahorradores de corte conservador, especialmente los planes de pensiones de renta fija a corto plazo, dado que, cuanto menor sea el plazo de inversión, menor es el riesgo de estos activos (es lo que se conoce como el riesgo de duración).
Últimamente, estos planes de pensiones están teniendo unas aportaciones netas negativas (es decir, está saliendo dinero de esta categoría). La razón es el bajo rendimiento de este tipo de instrumentos financieros en un entorno de tipos bajos de interés.
Para ser más exactos, en los últimos 25 años, los planes de pensiones de renta fija a corto plazo han logrado una rentabilidad anual media del 1,51%. En los últimos 10 años, esta rentabilidad se reduce al 0,68%. Incluso podríamos hablar de rendimientos negativos si nos vamos a un plazo trianual y quinquenal.
Para configurar una inversión en renta fija que sea rentable, sin descuidar la estabilidad que valoran aquellos inversores conservadores, es necesario diversificar y construir una cartera flexible.
Los planes de pensiones no gozan de esta característica. Por ejemplo, podemos encontrar en el mercado de fondos de inversión productos que consiguen combinar de una forma coherente valores de renta fija.
Por ejemplo, la categoría de fondos de inversión de renta fija euro a corto plazo ha conseguido una rentabilidad anual media en los últimos 10 años del 2,22%. Una rentabilidad algo superior, pero importante cuando nos movemos en un contexto de bajos tipos de interés y cuando hablamos de períodos temporales tan amplios (el interés compuesto actúa con mayor eficacia).
Planes de pensiones de renta fija largo plazo
No sólo la renta fija a corto plazo ha perdido aportaciones netas en 2019. Los planes de pensiones de renta fija a largo plazo, aquellos cuya única diferencia es que invierten en activos con plazos de vencimiento superiores (más rentables, pero con un plus de riesgo), también; aunque en menor medida.
Volvemos a incidir en el pobre rendimiento de los activos de renta fija dadas las condiciones de tipos de interés existentes.
En definitiva, no podemos esperar mucho de la renta fija, pero estos planes de pensiones funcionan mejor en períodos de largo plazo. Su rentabilidad media anual en los últimos 25 años ha sido del 3,06% (un 2,05% en los últimos 10 años).
Planes de pensiones de renta fija mixta
Esta categoría de planes de pensiones no sólo se alimenta de instrumentos de renta fija, permite incorporar activos de renta variable sin superar el 30% del patrimonio de todo el plan de pensiones.
Esta diferencia les hace subir un peldaño en la escala de riesgo. Pero ¿merece la pena la rentabilidad ofrecida?
Observando las estadísticas, comprobamos que, en los últimos 25 años, esta categoría de planes de pensiones ha conseguido una rentabilidad anual media del 3,31%. Lo que supone sólo una diferencia de 25 décimas sobre los planes de renta fija a largo plazo.
Pero, además, en el plazo de 10 años, ha logrado un rendimiento medio anual inferior a la renta fija pura: un 1,61%.
Planes de pensiones de renta variable mixta
En este tipo de planes de pensiones, la exposición a activos de renta variable aumenta. También se trata de una cartera combinada. Sin embargo, ahora las inversiones en renta variable deben oscilar entre un mínimo del 30% del patrimonio y un máximo del 75%. El resto, se destina a valores de renta fija.
La rentabilidad, lógicamente, debe aumentar. El problema es que, también hablamos de un aumento significativo del riesgo y no todos los perfiles de ahorradores son aptos para una alta exposición a la renta variable. En este campo, nos movemos entre las inversiones moderadas y dinámicas (a pesar de que los planes de pensiones tienden siempre a la moderación).
No obstante, ya podemos hablar de una rentabilidad anual media del 4,10% en los últimos 25 años y de un 3,72% en los últimos 10.
Planes de pensiones de renta variable
El riesgo de estos planes de pensiones suele ser elevado. Las inversiones en acciones están sujetas a una mayor volatilidad. Deberíamos esperar unas rentabilidades atractivas, como sucede con los fondos de inversión.
Por ejemplo, la categoría de fondos de inversión de renta variable internacional en activos de Estados Unidos ha logrado una rentabilidad anual media del 11,49% en los últimos 10 años. No podemos hablar de planes de pensiones de esta categoría, por las razones expuestas anteriormente: son productos financieros que no tienen la flexibilidad suficiente.
En el mercado de fondos de inversión podremos encontrar un producto adecuado a una estrategia inversora determinada, adaptado a un perfil concreto de riesgo y con una política inversora definida de un modo más preciso. Se trata de un mercado más amplio y con productos más versátiles.
En el caso de los planes de pensiones de renta variable, la categoría es amplia y no permite afinar con nuestra estrategia de ahorro. Este tipo de planes de pensiones ha logrado en los últimos 10 años una rentabilidad anual media del 6,57%. En los últimos 25 años, la rentabilidad media queda en el 4,28%.
Planes de pensiones garantizados
Para finalizar de exponer los tipos de planes de pensiones, haremos referencia a aquellos en los que los titulares tienen la garantía de que recibirán el dinero invertido (sólo las aportaciones realizadas), siempre y cuando se mantengan sus ahorros hasta una fecha de vencimiento.
La rentabilidad anual media de estos planes de pensiones ha ascendido a un 3,80%. Este tipo de planes de pensiones no se ofrecen a 25 años (el vencimiento no llega tan lejos).¡
A continuación, mostramos un gráfico de las rentabilidades medias anuales de los diferentes tipos de planes de pensiones.
Tipos de planes de pensiones según sus sujetos constituyentes y fondos de pensiones en que se integran
Unas modalidades de Planes de Pensiones (Sistema de Empleo, Asociado o Individual) se definen en función de quienes sean sus promotores y partícipes. Considerando las modalidades de Planes de Pensiones a que se limiten, los Fondos de Pensiones presentan determinadas categorías (Fondos de Pensiones de Empleo o Personales).
Respecto de los promotores de los Planes de Pensiones, cabe hacer las siguientes observaciones:
- Los Planes de Pensiones de Empleo y Asociados podrán tener un único promotor o varios que lo promuevan conjuntamente. Los Planes de Pensiones Individuales sólo podrán contar con un promotor.
- El promotor de un Plan de Empleo sólo podrá serlo de un Plan de tal Sistema y no podrá ser simultáneamente tomador de un Plan de Previsión Social Empresarial.
En relación con los promotores de los Fondos de Pensiones, cabe precisar:
- En los Fondos Personales, actuará como promotor del Fondo necesaria y exclusivamente su entidad Gestora.
- En los Fondos de Empleo, sus promotores podrán ser cualquier empresa o empresas promotoras de Planes de Empleo a instrumentar en el Fondo, así como los sindicatos, sus federaciones y confederaciones, y asociaciones empresariales, legitimados para la negociación colectiva en el ámbito supraempresarial. A falta de los anteriores, el promotor será la entidad Gestora del Fondo de Empleo.
Tipos de planes de pensiones según sus obligaciones
Los Planes de Pensiones presentan las siguientes modalidades en función de las obligaciones estipuladas:
- Planes de Aportación Definida. Está predeterminada la cuantía de las aportaciones de los partícipes o las contribuciones de los promotores de Planes de empleo.
- Planes de Prestación Definida. Está predeterminada la cuantía de todas las prestaciones a percibir por los beneficiarios.
- Planes Mixtos. Su objeto es, simultánea o separadamente, la cuantía de la prestación y la cuantía de la contribución. En particular, comprenden:
- Los Planes en los que, estando definida la cuantía de las aportaciones, se garantiza la obtención de un tipo de interés mínimo o determinado en la capitalización de aquéllas o una prestación mínima.
- Los Planes que combinan la Aportación Definida para alguna contingencia, colectivo o Subplan, con la Prestación Definida para otra u otras contingencias, colectivos o Subplanes.
Los Planes de los Sistemas de Empleo y del Sistema Asociado podrán ser de cualquiera de las tres modalidades anteriores. No obstante, existen algunas excepciones, como la de los Planes de Empleo de promoción conjunta que, salvo en determinados casos, han de ser de Aportación Definida para la contingencia de jubilación.
Los Planes del Sistema Individual sólo podrán ser de la modalidad de Aportación Definida, sin que el Plan pueda garantizar un interés mínimo en la capitalización. Una vez acaecida la contingencia, el Plan Individual podrá prever la garantía de las prestaciones causadas y sus posibles reversiones, siempre que éstas se garanticen en su totalidad mediante los correspondientes contratos con entidades aseguradoras o financieras.
Diferencia entre planes de pensiones y fondos de pensiones
Aunque a veces se confunden, en realidad no significan lo mismo, ¿lo sabías?
Frecuentemente se habla de planes de pensiones y de fondos de pensiones de forma indistinta. Pero no son lo mismo. Conoce en este artículo no solo la diferencia entre fondo y plan de pensiones, sino también cuál es el perfil de cada uno.
Los planes de pensiones
Los planes de pensiones son un instrumento de ahorro previsional a largo plazo. Están destinados principalmente a generar un ahorro que en la jubilación permita complementar los ingresos de la pensión pública de la Seguridad Social. Los planes de pensiones son un instrumento complementario y nunca sustitutivo del sistema público de pensiones.
Los planes de pensiones permiten a sus partícipes percibir prestaciones en forma de renta o capital y a cargo del ahorro acumulado en los mismos, siempre que ocurra alguna de las contingencias o supuestos que permiten su rescate, entre ellos y además de la jubilación, la incapacidad laboral, el desempleo de larga duración o la enfermedad grave.
Los fondos de pensiones